En algún lugar de Karakura

8 menos rodearon a todos y se pusieron a cargar un cero, mientras tanto el arrancar ocultaba magistralmente su reiatsu y estaba un extraño aparato para abrir el camino del dangai.
-Un poco más, y la sociedad de almas sera de Aizen-

El viper al fin se apartó y me dejo solo con el vastolord, mi Kurohitsugi alcanzó al enemigo, esperaba la lluvia de sangre que aquello hiba a crear, pero resulto ser una estúpida copia.

¡Deja de esconderte y sal de una vez!

Vi como otro capitan llegaba matando a una copia de un rayo, los demas capitanes se dedicaron a matar a las copias, yo mientras continuaba buscando al verdadero.

El vastolord se largó al igual que izo el arrancar, la distracción fue bastante buena y la garganta se volvió a abrir, miré hacia donde los menos empezaban a salir de nuevo y una sonrisa se dibujo en mi rostro.

Los muy cobardes se han ido y nos han dejado a sus menos, por lo menos tendre algo de diversión.

Apunté con mi mano hacia un menos que estaba apunto de entrar y el hueso de la palma salió disparado atravesando al menos que cayó sin vida sobre el suelo.

Uno menos ¡Aqui estoy menos! ¡Venid a por mi!

Airo bajó con un shunpo y volvió ha aparecer al lado de Ryu.
-Escucha Ryu, llévate a los que estén más heridos o que tengan menos reiatsu a la sociedad de almas-
Luego con otro shunpo apareció delante de Dokugan.
-¿Tu eres el capitán de la 11ª verdad? Encuentra a ese arrancar como sea, da igual si lo matas-

El Menos cayó al suelo causando una gran polvareda, entonces el shinigami que aniquilo a uno de los clones del vastolord con un rayo me dio permiso para buscar al arrancar y matarlo, supe quien era aquel shinigami cuando pronuncio mi nombre, se trataba de Airo, el capitán y comandante del 1º escuadron.

Eso esta echo, ya me estaba empezando a aburrir de matar a estos Menos.

Deshice mi Bankai ya que no tenía sentido seguir manteniendolo por mas rato, estaba malgastando mi reiatsu, con un leve destello volví a mi forma original con Tsubaki en mano.

Te traere la cabeza de ese arrancar aunque me cuesta la vida comadante. - dije inclinándome ante él.

Un Menos se lanzó hacia donde estabamos los dos, con un leve movimiento de shunpo y de mi katana Tsubaki lo corte por la mitad y inmediatamente desaparecí de la zona de combate con otro movimiento de shunpo.

Me posé en el tejado de un edificio bastante amplio, la batalla se veía incluso desde aquí al igual que la grieta con los Menos saliendo. Cerré los ojos y me concentré intentando encontrar la esencia de aquel arrancar, tenía que ser mio.

¿Donde estas?

Entonces sentí una presencia, totalmente distinta a la de los Menos, me resultaba familiar, sin duda era aquel arrancar y esta vez no se me escaparía, Tsubaki y yo nos encargariamos de aquello.

Tán rápido como el viento que soplaba desaparecí con el shunpo de aquel tejado hacia la zona donde estaba aquel arrancar.

El capitán Ryu apareció de repente y aumentó su velocidad para llegar al arrancar antes que yo.

Veo que también te gusta la lucha ¿eh? Pero yo seré el primero en mostrarle mis respetos a ese maldito.

Con movimientos de shunpo me puse por delante del capitán y seguí avanzando hacia donde estaba el arrancar cuando de repente apareció el viper que estuvo con nosotros luchando contra los Menos, cada vez eran mas y eso no me hacia gracia, yo queria el arrancar para mi solo.

¡Maldita sea! Menos mal que el comandante me mandó a mi solo a por el arrancar si no tendriamos aqui a todo el seiritei.

Estabamos llegando al lugar donde se encontraba nuestro enemigo, Tsubaki tambien lo notó porque empezó a brillar como nunca lo había echo.

¡¡Yo me lo pido primero!!

El arrancar apareció con un sonido delante de Ryu y lanzó una ráfaga de balas.
-Malditos, ahora no vais a evitar que abra el dangai para que mis menos y yo dominemos la SS, ¡cero!-
Un cero apareció de la palma de la mano del arrancar y fue directo a por el vizard y el capitán del 11º escuadrón.

Tres menos rodearon a Airo y empezaron con la carga de un cero.
-Vais a necesitar más que tres tristes ceros, ¡destruye la barrera impenetrable entre el cielo y la tierra con tu soplido, Kazegafuku!-
Tras liberar el bankai, el taicho lanzó un gran tornado a los menos que quedaron destrozados y con una explosión de viento a sus pies se situó cerca de la garganta.
-Ahora si... tengo que cerrar esa garganta para que no pasen más-
Palpó su bolsillo buscando algo pero no encontró nada.
-Donde esta, sin eso no puedo cerrar la garganta-

El arrancar por fin decidió dar la cara, pero en vez de posarse delante de mi se puso delante del capitán Ryu, el arrancar le disparó y a mi y al viper nos lanzó un cero desde su mano que Ryu desvió y le devolvió el golpe lanzándole unas ondas de reiatsu con su espada.

Yo no iba a ser menos, salí detras de Ryu y me lanzé hacia el arrancar alzando a Tsubaki.

¡¡Florece Tsubaki!!

La katana se alargó y su hoja se tintó de negro ejecutando una estocada tán rápida que ni el mismo arrancar iba a poder esquivar.

Tsubaki No Mai

Spoiler:

El arrancar esquivó los ataques con un sonido y apareció tras Dokugan.
-Maldita basura,no vais a fastidiar mis planes, y menos después de que mis menos os cansaran tanto-
Desenfundó su espada y lanzó un tajo hacia el capitán de la 11ª.

El arrancar desvió los dos ataques efectuados apareciendo detrás mia y lanzó un tajo con su espada dirigido a mi, por fin había logrado atraer su atención. Me giré y paré el golpe con la mano izquierda, la sangre empezó a correr por la hoja de aquel arrancar, le mire directamente a los ojos.

¡¡Quien te ha dicho que estoy cansado!!

Inmediatamente agarré con fuerza la espada del arrancar y lo lancé junto con su espada a un lado para a continuación alzar la katana hacia donde estaba, Tsubaki emitió un pequeño brillo para a continuación alargarse hacia el cuerpo de aquel arrancar.

Spoiler:

¡¡¡¡Muere!!!!

El arrancar había quedado destrozado en pedazos de hielo tras los ataques de los capitanes, la garganta se cerro casi al instante después de que el arrancar muriera pero un gran número de menos consiguieron pasar al mundo humano y rodearon a los shinigamis y vizards que se encontraban combatiendo todavía.

(off: a partir de ahora no posteare lo que hacen los menos porque son demasiados para controlarlos a todos y seguro que me dejo algo con todos combatiendo, poned en vuestros posts lo que hacen los menos contra los que luchais)

Mi ataqué logró impactar en aquel arrancar haciéndolo estallar en mil pedazos, pero faltaba una cosa, su sangre, al estar congelado no había ningún baño de sangre.

Tsk, maldito hielo

La diversión se había acabado, de repente apareció el que parecía ser el teniente de Ryu, había llegado demasiado tarde, eso me alegró porque así habría menos en la batalla.

Por desgracia se acabo todo

Tsubaki estaba triste, no hubo baño de sangre y encima ambos teníamos ganas de más, nuestra tristeza se desvaneció cuando unos Menos nos rodearon, habrían logrado salir antes de que la garganta se cerrara, estaba harto de matar a Menos pero por lo menos me darían algo de diversión antes de volver al aburrido Seiritei.

Vaya, veo que estos Menos quieren seguir luchando, esta bien

Alze a Tsubaki hacia el cielo mientras gritaba - ¡¡Raikiri!!

Inmediatamente un sinfin de rayos empezaron a caer donde estaban los Menos destruyendo a cuatro de ellos.

-Al menos ya no pasan más pero... esto es un ejercito de menos-
Con un movimiento de su mano dos tornados que aparecieron a los pies de dos menos,dejándolos destrozados, empezaron a moverse alrededor de Airo destrozando a los menos y sirviendo de escudo.
Unos minutos después estaba rodeado de 10 menos cargando ceros.
-Vais a necesitar más que 10 ceros para derrotarme-
El shinigami lanzo varias ondas de aire que cortaron las máscaras de aquellos menos.

Ryu y su teniente acabaron con unos cuantos Menos, pero aun así había muchos rodeándonos, me sentía feliz, era todo lo que yo y Tsubaki podíamos desear. No me paré ni un segundo ya que había tantos enemigos y tenía que darme prisa en matarlos a todos antes de que los demás, no permitiría que matasen mas que yo, eso nunca.

Un Cero impacto en mi espalda justo cuando cortaba por la mitad a un Menos, mi reacción no fue lo suficiente rápida ya que el escudo de reiatsu no se formo lo suficientemente rápido haciendo que mi espalda se quemara un poco, salpicaba un poco de sangre, pero eso no me echaría hacia atrás, no iba a dejar que unos inútiles Menos acabaran conmigo.

Concentré mi reiatsu en Tsubaki, di un golpe haciendo que apareciera un tornado elevando por los aires a unos cuantos Menos, a continuación con mi shunpo me iba situando donde estaba cada Menos y con un movimiento de Tsubaki iba matándolos antes de que tocaron el suelo.

Spoiler:

Aterricé en el suelo y mire hacia arriba con los brazos abiertos mientras que la sangre de los Menos caía en forma de lluvia bañándonos a Tsubaki y a mi.

Esta es la mejor parte del combate